Capítulo 18 -Te Apoyaremos-

-Muy bien gracias… Quiero presentarles  a Atenea… Mi novia- Se llevo la mano a la cabeza un tanto apenado y los chicos solo vieron a Atenea.

-Un gusto enorme, soy Gustav- extendió su mano, ella igual y le dio un beso en la mejilla. –Bill nos ha comentado de ti…-

-¿En serio?- se alegro de escuchar eso

-Por supuesto, por cierto, Georg –hace la misma acción que Gustav. –Nos dijo muchas cosas- sonrió, pero vio a Bill con una mirada de ‘No todo’

-Me hace feliz escuchar eso- Nea vio a Bill enternecida por el momento.

-Se nota el amor en el aire- Rió Gustav

-Lo sé- dijeron los enamorados al mismo tiempo.

-Bueno- dijo Bill –Pasemos a la cocina, haremos algo rico de comer- sonrió

-Sí- contestaron todos

-Parece como si se conocieran desde hace mucho… ¿No crees Georg?- Le comentó Gustav a su amigo en voz baja.

-Sí… Lo note también- Fueron a la cocina

-¿Qué les gustaría comer?- preguntó Nea a todos

-¿Tú harás de comer?- Gustav

-Sí… Quiero darles una buena primera impresión- sonrió

-No es por nada, pero cocina delicioso.- menciono Tom haciendo un gesto de gozo.

-Perfecto- Georg se froto las manos.

-¿Puedes hacer la pasta especial?- preguntó Isabela.

-Por supuesto- Sonrió la joven y comenzó a preparar las cosas con la ayuda de Bill.

-¿Qué más te paso?- Bill

-La salsa de tomate- Bill se la paso y empezaba a oler delicioso

-Comienzo a comprobar que es verdad lo que dice Tom- mencionó con la nariz al aire Gustav, Nea volteo y le dedico una sonrisa

-Listo.- Tenía en las manos guantes para sostener el recipiente –Esta algo caliente, pero pueden probar un poco- Tenía un cucharon especial para pastas y comenzó a servir los platos, los chicos empezaron a saborearse la comida.

-Suculento- dijo Gustav mientras Georg expresó con las manos que estaba muy bien.

Siguieron comiendo y platicando de muchas cosas, Isabela tenía que salir con Henry así que salió, Cloe había ido por unas cosas a su casa y Atenea fue a cuidar al bebé. Quedando solo Tom, Gustav, Bill y Georg.

-Ahora, ¿por qué no nos dijiste que fuiste papá?-  Gustav  vio directo a los ojos  a Bill, Georg de la misma forma.

-Perdón, pero empezarían a cuestionar porque la escogí…-

-¿Pensaste en que no te apoyaríamos?- Preguntó Geo

-Bueno… Algo así- contestó apenado el muchacho

-En realidad eres tan tonto Bill- le dijo Gustav, Bill lo vio a los ojos de nuevo –Siempre te apoyaremos… Por nuestras ideas locas ahora estamos como estamos… ¿Qué no?- sonrió

-Pues… Sí-

-¿Entonces?- Geo

-Ya dejen a mi pobre hermano, lo hacen sentir mal-

-No Tom, es que, le hubiéramos pasado que fuera divorciada… Pero hacerse cargo de un bebé que no es suyo, es otra cosa muy distinta…- Geo

-¿Les parece mal?- preguntó un poco malhumorado Bill

-No, es tú vida, nosotros no tenemos por qué meternos- Gus

-Además, tú y ella se adoran… Lo hemos comprobado con tan solo verlos hoy- le dijo Geo

-Sí, y nos alegramos que ya por fin tengas alguien con quien estar… Te vemos mucho mejor que antes Bill, te vemos feliz…-  Comentó Gustav y en la cabeza de Bill empezaron a abundar recuerdos de cómo era antes de conocer a esa niña… Su vida era gris y sin sabor, ahora solo quería vivir para verla a los ojos día con día.

-Entonces… ¿Me apoyan?- preguntó sonriente

-¡Claro!- contestaron al mismo tiempo

-Bill, somos tus amigos, siempre te apoyaremos… ¿Por qué empezó toda esta aventura?... Por nuestras locuras ¿No?- Sonrió Georg

-Si… Pero Tom al principio no me apoyo- le dedico una sonrisa molesta a su hermano.

-Por que Tom siempre querrá tu bien, igual que mi hermana conmigo- menciono Gustav

-Así es…- Comentaba Tom, un tanto tímido pues no le gustaba demostrar en frente de los demás, su lado cariñoso.

-Gracias a Todos…- Sonrió Bill un poco melancólico.

-Por nada- Contestaron los demás.

-Ahora iré con Atenea… Le había prometido que ella no cocinaría…- Dijo Bill

-Pues, que bueno que lo hizo porque sabía delicioso- Se le lleno de agua la boca a Georg al recordar.

-La verdad es que sí… Si sigue cocinando ella, considerare mudarme aquí- Rió Gustav.

-Que graciosos.- Los celos se apoderaban de Bill

-¡Hombre! No seas celoso…- Le dio una palmada Tom

-¡No soy celoso!... Y me iré a ver cómo está, que descansen chicos… Me alegro que ya estén aquí.- Sonrió y se fue a ver a su amada.

Toco la puerta cuidadosamente para no hacer un ruido que alterara al bebé.

-Pasa- Contesto Atenea

-Hola ¿Cómo estás?- preguntó, mientras ella estaba sentada en la cama, dándole de comer a Will.

-Muy bien, siéntate- Quito la colcha que la cubría para hacerle un lugar a Bill

-Gracias… por cierto, perdón… Prometí que no te dejaría hacer nada que te pudiera alterar…- mencionó apenado.

-No te preocupes Bill… ¿Les gusto no?- sonrió

-Les encantó diría yo…- Rieron los dos

-Además, tú me ayudaste, así que no fue nada… No te sientas mal ¿Ok?-  Lo vio a los ojos y sonrió tierna

-Ok- La beso y se acurruco en su hombro, para observar al bebé que ya había acabado y estaba dormido.

-Es hermoso ¿No?- preguntó con un brillo en la mirada

-Como la madre- Bill beso su frente y sus labios.

AL DÍA SIGUIENTE

-¿Qué rayos?- Dijo Bill mientras apagaba el despertador. Se levantó y ducho. Ya cambiado fue a buscar a Atenea para la cita que tenían con la doctora. -¿Lista?- Toco la puerta

-Sí ya vámonos- Dejo al bebé en la cuna

-¿Y Cloe?- Preguntó Bill

-Fue a calentar las mamilas, quiero que el bebé tenga todos los nutrientes necesarios para que crezca sano- Sonrió y Bill le dio el brazo para que se fueran caminando juntos

-Ya verás que así será- Se dieron un corto beso  y subieron al auto.

CON LA DOCTORA

-Buenos días Señores Kaulitz- Les dio la mano, era una señora no muy vieja, de unos 45 años, delgada, de tez clara, ojos negros y pelo rubio tinturado.

-Buenos días- mencionaron amables

-Siéntese- les indico y ellos hicieron caso

-Gracias-

-Bueno, primero que nada debo hablarles más sobre el cuidado de ¿William?-

-Sí- respondió Atenea

-Tenemos que estar con los chequeos constantes, por lo mismo de la situación en la que nació… No vimos encontramos nada malo… Pero es necesario- Los chicos escuchaban atentos, Nea se angustió un poco al escuchar eso ¿Y si a Will le ocurría algo? Se moriría si pasaba eso. –Tú le das pecho ¿cierto?-

-Sí y un poco de fórmula.-  contesto Atenea

-Haces bien, ¿Te lo recomendó Claudia cierto?- Preguntó

-¿Claudia?- Dijeron extrañados la pareja

-Sí… Claudia De la Cuesta, pero de cariño le dicen Cloe-

-Ah… Es que solo la conocíamos por Cloe.- Sonrió Bill

-Sí ella no lo recomendó- Nea

-¿Ya saben los cuidados que deben llevar como pareja?- Alzo una ceja la doctora

-¿Cuidados?- Pregunto Atenea

-Sí…- Sonrió picara – Yo sé que es difícil jóvenes, pero…Nada de relaciones en los MÍNIMO 40 días después del parto- Atenea solo se sonrojo y Bill sonrió sutil

CONTINUARA

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Buajaja Claudia, me lo tenía bien guardado no? :3 Bueno, espero les guste el capítulo de hoy ^^ Disculpen si lo subo hasta ahorita, exámenes ¬¬ GRACIAS POR LEER!

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